Siempre creí que la vida se basaba en la frase "ya pasará..." o en el refrán "Tras la tormenta sale el Sol", pero ya no creo más, me he decepcionado del mundo y así, tal cual, renuncio a ser parte de él.
Adiós mundo porque detesto tu fuerte ruido,
Adiós mundo porque ya no traes aromas con recuerdos bellos,
Adiós mundo porque mi sonrisa se ha marchitado al tener que enfrentarte día a día con el mismo ímpetu de siempre,
Adiós mundo porque no soporto la cantidad de gente que tienes sobre ti,
Adiós mundo porque me aburrí de la lejanía de las personas entre sí y de su innegable cercanía física,
Adiós mundo porque el egoísmo y el egocentrismo pareciera ser que ya no dejan respirar a quien quiere compartir y valorar al otro como persona, no como producto,
Adiós mundo porque ni en la comodidad de mi cama puedo sentirme segura, sabiendo que siempre algo ocurre afuera de mi refugio, sabiendo que siempre le haces daño a alguien más, sabiendo que ese alguien más algún podría ser yo,
Adiós mundo porque ya definitivamente, no te quedan lugares gratuitos hermosamente visitables,
Adiós mundo porque lo primero que veo al salir de mi casa es una calle de cemento rodeada de más casas somnolientas que dejan ir a sus seres queridos sin saber si volverán,
Adiós mundo, porque los sueños que yo tengo no los encontraré aquí,
Adiós mundo, porque me aburrí de esperar que saliera el Sol después de la tormenta, y ¿sabes por qué mas? porque jamás aprendí a bailar bajo la lluvia, así que por eso, Adiós mundo, no fue un gusto haber sido parte de ti, y mucho menos te enviaré postales desde mi nueva dirección: La Luna.
