
*
Son mil y un día de condena por cada sonrisa,
Son doscientas horas de espera por cada palabra,
Es un tercio de vida por cada beso,
Son quinientas noches de cárcel por sentir esto,
Son las ocho mil lágrimas que botaré en tu nombre,
Mil insultos, cien peleas...
Sobran las ganas de huir de aquí.
Sobran las ganas de no estar ahí.
Sobras las ganas de no saber de ti, de tu nombre, de tu risa, de tus ojos, de tu vida.
Huiría por que sé en lo que me estoy involucrando con cada beso y con cada gesto.
Huiría por que sé que esto no es eterno.
Huiría por que no quiero pagar condena alguna.
Huiría por que sé que la vida continuaría.
Sin embargo...
Me quedo por que sé que es lo que siento.
Me quedo por que no quiero no saber que existes.
Me quedo por que eres tú y solo tú al que quiero.
Me quedo por que prefiero vivir todo lo que tenga que vivir, pero junto a ti.
Son mil horas, millones de minutos, milésimas de segundos, corren, pasan, dejan de existir, pero ya no me importa, tú estás aquí y se van... sí, al fin se van, sin nostalgia, sin recuerdos. Te miro y me miras....¿se fueron ya?.